Así lo ha manifestado el Banco Central Europeo (BCE) en su último Boletín Económico. Las familias españolas, finlandesas y holandesas son las que más se benefician de los tipos bajos de interés de la zona euro.
El último Boletín Económico emitido el pasado 3 de agosto por el Banco Central Europeo (BCE) reflejaba que España, Finlandia y Holanda son los tres países que más se están beneficiando. Una situación que no es homogénea en el resto de los países europeos.
El motivo es que en estos tres países el endeudamiento de los hogares ha sido “especialmente elevado” respecto al volumen de activos. En el caso de España la situación se acentúa debido al predominio de las hipotecas a tipo de interés variable, lo que permite que España se beneficie más de los bajos tipos de interés.
¿Qué pasa en el resto de países?
El resto de países de la zona euro como Bélgica, Austria o Italia han visto cómo sus ingresos netos tuvieron descensos más pronunciados debido a que cuentan con un porcentaje de activos financieros que generan intereses. Otros como Alemania, Francia y Portugal, la variación ha sido imperceptible. Cabe destacar que los países más afectados por la deuda soberana fueron los menos favorecidos, debido al aumento simultáneo de sus primas de riesgo.
Por otra parte, las Administraciones Públicas y las sociedades no financieras también se encuentran entre los más beneficiados por los bajos tipos de interés.En el caso de las Administraciones Públicas, los países que mejor han sabido sacar partido a los intereses bajos han sido Bélgica, Alemania y Francia. Por su parte, las sociedades no financieras aumentaron sus ingresos netos por intereses superiores al 1% del Producto Interior Bruto (PIB) en España, Francia, Finlandia e Italia.
El sector financiero pierde ingresos
En la evaluación que el BCE hace del sector financiero destaca que desde el tercer trimestre de 2008 experimenta disminuciones de ingresos por intereses. Esto se debe a que este sector tiene más activos que pasivos que reporten ingresos. Aunque cabe decir que los ingresos por intereses no son el único factor determinante para evaluar la rentabilidad del sector.