
Hace unos meses, un estudio realizado por la empresa ey –antes ernst&young– revelaba que en las principales ciudades españolas ( Madrid y Barcelona ) se reactivaban las operaciones inmobiliarias.Los precios ya no estaban bajando. Hay zonas en las que incluso están subiendo,aunque el nicho de mercado que está creciendo más es la de viviendas libres a precios muy, muy bajos.
Cada vez más ‘players’ compran suelo para hacer 100 viviendas en altura. Son promociones mucho más pequeñas que las de antes de la crisis.
Ahora, estos grandes “players” son empresas extranjeras que cuentan con financiación al 100% y que compensan la subida de impuestos con el ahorro que consiguen en los precios. Es un negocio bastante excluyente.
Por otro lado también hay empresas españolas que están comprando promociones inacabadas a los bancos para terminarlas y venderlas. En el último año ha habido dos operaciones que han calentado el mercado, la de blackstone y la de goldman sachs con el ivima.
Una de las preocupaciones que tienen los inversores extranjeros a la hora de invertir en España es la situación jurídica. También influyen las tensiones sin resolver como la del mercado laboral o el tema de Cataluña.
El tipo de producto que busca el inversor extranjero es sobre todo volumen. No quieren hacer una inversión de 2 millones de euros, sino que tienden a buscar paquetes.
La vivienda tipo más demandada es de tres habitaciones y un coste de aproximado de 260.000 euros, situada en Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía.
El 45% de los inversores británicos interesados en el mercado español está dispuesto a comprar vivienda en los próximos 6 meses.
El 60% de los posibles inversores centraron su interés en Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía, aunque, como explica Daniel Talavera, director de Inmoaction, “podemos confirmar que, si bien estas tres autonomías son las preferidas, las demandas resultan variadas y agentes de cualquier región de España pueden generar en el Reino un nicho de mercado importante. Por ejemplo, solamente para el norte de España, hemos tenido 11 demandas”.
Por comunidades de destino, Madrid surge como la gran ganadora, con 8.723 millones de euros (un 49,5% del total) y un avance del 0,6%. Unos datos, tal y como confirmó García-Legaz, condicionados por el efecto sede (la ventaja que le proporciona ser la capital y que un gran número de multinacionales estén situadas en su territorio). Por el contrario, la entrada de inversión en Cataluña descendió un 15,8%, mientras que en el País Vasco creció un 28,5% y en la Comunidad Valenciana experimentó un avance del 381,2%.
La economía española está recuperando el atractivo que perdió bruscamente para los inversores en 2012