Estamos viviendo una realidad muy complicada a nivel económico que afecta tanto al nivel de calidad de vida de las personas como a las posibles inversiones nacionales y extranjeras que estén planteándose invertir en España.
La crisis inflacionista es uno de los principales obstáculos al que han tenido que hacer frente todas las economías a nivel mundial este último año, y que todavía a día de hoy, sigue suponiendo una grave problemática para el bolsillo de millones de ciudadanos.
En España, los precios han seguido creciendo intensamente, ya que la inflación interanual del IPC en el pasado mes de enero se situó en el 5,8%, mientras que la inflación subyacente (indicador que muestra la variabilidad de los precios de consumo a corto plazo) subió hasta el 7,5%.
Definición de la inflación subyacente
La inflación subyacente (en inglés, core inflation), es un indicador que muestra la variabilidad de los precios de consumo a corto plazo más precisa que la inflación general o convencional.
Este indicador de inflación nació en la década de 1970, tras una gran crisis energética. Debido a la volatilidad de los precios se vió necesario identificar las variaciones de los precios excluyendo del índice de precios al consumo (IPC) los componentes más volátiles como: El índice energético (gasolina, electricidad, gas…), El índice alimentos no elaborados (frutas, verduras…).
De esta forma, se ha convertido en un indicador indispensable para el estudio del comportamiento de los precios y toma de decisiones entre los bancos centrales, entre los analistas, y en general por todo el mundo económico.
Tiene una capacidad real de reflejar los cambios en los precios de una forma menos errática, que mediante la medición de esos cambios por parte del índice de precios al consumo (IPC).
Principales diferencias entre inflación subyacente vs. inflación general
- La inflación general se utiliza para comparar la evolución de los precios a largo plazo, mientras que la Subyacente permite medir a corto y medio plazo, comparando un mes o trimestre con otro.
- La inflación general, a través del Índice de Precios de Consumo (IPC) mide los precios de la economía de un país de manera conjunta, mientras que la Inflación Subyacente sirve para identificar y entender de forma más precisa la evolución de los precios.
- La inflación general tiene en cuenta la evolución de precios a nivel general de aquellos productos y servicios que consumimos; la subyacente no tiene en cuenta ni la energía ni los alimentos no elaborados para su cálculo.
¿Por qué invertir en Rentas Vitalicias es una de las mejores formas de afrontar esta subida de precios?
Como vemos, la Inflación subyacente está descendiendo más lentamente que la inflación general; y, teniendo en cuenta que no tiene en consideración la subida y bajada de marcadores tan importantes a la hora de invertir en Rentas Vitalicias como es el gas, los suministros eléctricos…; es la manera más segura y rentable de invertir.
Ya que, este marcador, indica que la inflación más grande está en los alimentos, servicios… que poco intervienen en el sector inmobiliario.
Invertir en Rentas Vitalicias Inmobiliarias es una muy buena manera de ampliar tu cartera de inversiones sin asumir mucho riesgo y siendo conservador; ya que es una inversión a más largo plazo e independiente de las distintas fluctuaciones del mercado como conflictos bélicos, catástrofes mundiales…
En Inversión Renta Vitalicia llevamos más de 25 años trabajando con este producto inmobiliario dirigido a inversores y que, cada vez, reporta más seguridad y beneficios a nuestros clientes.